Estoy feliz. Casi tanto como Mari Carmen, mi amiga del autobús, que se jubila y se ha teñido de azul. La felicidad, como la jubilación o el cercanías, no pasan a menudo. Así que es justo y necesario pregonarlo a todo trapo, teñirse de azul y gritarle al mundo y al sub encargado provincial de pagos, sí, José Manuel, se está refiriendo a ti, que está feliz, jubilosa y que su pelo ahora es azul como el mar azul.
Y es así, desde esta predisposición eufórica, colocado hasta las cejas de dopamina, serotonina, oxitocina y endorfinas, como quiero encarar la pregunta de por qué Mari Carmen se tiñe el pelo de azul. Se me ocurren, a bote pronto, cinco razones: la ya mentada jubilación, el divorcio, el enviudamiento, las clases de yoga y el acontecimiento Remedios Cervantes. Empecemos por este último.
El acontecimiento Remedios Cervantes
Un acontecimiento, profanando a Badiou, no es un hecho más, sino la irrupción de lo aleatorio y lo imprevisible en la Historia. Al igual que Remedios Cervantes (que súbitamente y sin el permiso del concursante al que iba a ayudar en Atrapa un millón decidió que el azúcar era mejor conductor que la sal), un verdadero acontecimiento “surge del vacío de la situación”1 . Es decir: los ramalazos en la peluquería sólo pueden justificarse por sí mismos.
El yoga
Como no hago yoga, busco en Google “empezar a hacer Yoga”. Copio y pego la definición de Womens Health:
“Sientes tus pies descalzos enraizándote a la tierra, surge el silencio y repasas tu cuerpo conectándote con cada sensación y observas cada detalle; el movimiento fluye al ritmo del latido de tú corazón y surge la magia: cuerpo, mente y alma acompasados por la respiración, conectados, re-conectados, unidos en ese instante precioso donde a través de cada postura experimentas la sensación de vivir cada instante como único e irrepetible”
El enviudamiento
El enviudamiento es un tema más delicado. No quiero opinar tampoco mucho. Solo reportaré que según la web Nociones Unidas (de afortunadisimo nombre) hay 111 tonos de azul. Cada Mari Carmen puede escoger el que más le cuadre para esta compleja situación.
El divorcio
Creo que el divorcio encaja emocionalmente con Manuel Pacho, el creador del himno del PP, explicando el sentido de su composición. Manuel se entusiasma al hablar de un trabajador que deja su empresa y emprende por su cuenta. Y cada momento de esa epifanía en el garaje es un pa-pá, pa-pa-ra-pa-pam, en ascenso hacia el clímax. Ved el vídeo si no lo habéis hecho, pero es Mari Carmen.
La jubilación
Finalmente, la jubilación. El júbilo. La idea de que por fin Mari Carmen tiene permitido no tener que madrugar para existir. Da para fanfarroneo. ¡Dale, pavonéate, Mari Carmen! Muestra tu pelo ante el mundo. Jubilarse proviene de jubileo, un año excepcional, celebrado cada medio siglo según la tradición judía. Si los hebreos liberaban a los esclavos y dejaban un año sin arar la tierra, que menos que Mari Carmen se de un alegrón estético. La jubilación, como la felicidad y el cercanías, no pasan muy a menudo.
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1 La definición parte de Alan Badiou y de este artículo
